Sinopsis (terror):
En una
cena de cumpleaños del padre de la protagonista, una radióloga con un novio
francés, el espejo del comedor se desprende y se rompe haciéndose añicos.
Alguien dice que les espera siete años de mala suerte.
Pero es
peor que una mala suerte, los seres del otro lado usan los espejos para duplicarse
y luego matar a los personajes. La protagonista, sufre un tremendo accidente de
tráfico y no recuerda apenas quien es. Ni siquiera se imagina que podría ser
"la del otro lado".
Con unas
inquietantes escenas y un fatalismo omnipresente durante toda la película, se
desarrolla la acción.
Crítica:
Aquí nos encontramos con una joya de una
sobriedad inquietante. Lena Headey borda su papel y lo hace impresionantemente
creíble, paranoico y obsesivo. Richard Jenkins, a pesar de que no se lleva
tanto tiempo de actuación, es el peso que la da a la película esa peligrosa
seriedad de cotidianidad, de posibilidad.
A destacar el trabajo de todos los actores,
que sin efectos especiales ni alardes de maquillajes, consiguen ser "buenos
y malos" con inquietante realismo.
La crítica que he leído de The Broken, suele ser mala, pero creo que no les dieron suficientes regalos a los críticos, porque películas como ésta, aparecen cada cinco años con suerte.
La crítica que he leído de The Broken, suele ser mala, pero creo que no les dieron suficientes regalos a los críticos, porque películas como ésta, aparecen cada cinco años con suerte.
Hay escenas inquietantes, tanto que a pesar de
estar acostumbrado al cine de terror, se me hacen psicológicamente duras, y
todo indica en cada escena que no puede haber final feliz.
Está calculado cada detalle del vestuario,
cada mirada y silencio. Los impresionantes flashes de escenas pasadas, incomodan
deliciosamente el ánimo.
Que transcurra en Londres, a la película le da
clima tan gélido como gélida parece la piel de la protagonista.
Es terror que pega psicológicamente, que mina
lentamente y sin piedad.
Ideal para luego fumar con un café satisfechos
de que hayan artistas capaces de hacernos pasar tan buen rato, aunque sea un
poco inquietante. Porque solo dura 88
minutos que parecen dos horas, y en modo alguno por aburrimiento, sino porque
nos lleva a una posibilidad muy, muy, muy mala.
Director: Sean Ellis.
Actores:
Lena Headey, Richard Jenkins, Ulrich Thomsen, Michelle
Duncan,y Melvil Poupaud.
Nacionalidad: inglesa, francesa.